Una vez más, os escribimos para informaros de lo acontecido durante este mes de julio.
Lo primero, julio se cierra con un socio nuevo!! Ya sabéis que la aportación de los socios es vital para que podamos hacer algo por los animales que necesitan ayuda. Con las cuotas y las donaciones puntuales nos las vamos apañando para conseguir mejorar la vida de aquellos que llegan a nuestras manos.
El resto de las novedades de este mes son, básicamente, entradas de animales nuevos…
Eros en su casa de acogida, como un rey, pero esperando su oportunidad de encontrar un hogar definitivo que se está resistiendo demasiado…
Los Caramelitos han crecido ya un montón; han tenido infección de oídos por ácaros, pero después de tres semanas de tratamiento, ya están todos perfectamente y también esperan tener la suerte de ser adoptados. De hecho, dos de las hembras (Kira y Xena), están pendientes de concluir el proceso de adopción para que puedan irse con una familia que se ha enamorado de ellas al venir a conocerlas, así que es muy posible que para principios de agosto, si todo va bien, estén ya en su nuevo hogar!
En cuanto a las nuevas entradas…
Ya os contamos que, casi a punto de terminar el mes pasado, habíamos recogido a Alma, una gatina callejera que apenas se mantenía en pie y tenía dificultades para respirar; no sabíamos si, a mayores y por si fuera poco, también sufría una intoxicación… Pues tras varios días hospitalizada y, una vez recuperada, fue castrada y devuelta a su colonia.
Al día siguiente de rescatar a Alma, nos dieron aviso de una perra que estaba en una reguera. Nos personamos en el lugar y pudimos sacar del agua a una abuelita empapada y agotada. Es toda una señorona, así que la hemos llamado Dama. Ahora mismo se encuentra en casa de acogida y tras haber pasado la cuarentena, parece estar sana, aunque algo sorda… Es una perrita mayor, con canas y algo cascarrabias a veces, pero dulce y tranquila. Se merece una jubilación en condiciones, así que esperamos que pronto alguien se enamore de ella sin importarle los años que lleva a sus espaldas.
El día 2 de julio apareció Nira, una bebecita de gato. La habían sacado de un contenedor de basura… Aún necesitaba los cuidados de su madre, que ya no estaba a su lado, así que se quedó con nosotras y con la familia que siempre nos hace de acogida para los bebés lactantes. Ha tenido infección en los ojos y en estos últimos días ha estado algo pachuchilla, pero todo parece indicar que es fuerte como un roble y va a salir adelante. Dentro de unas semanas será una gatita blanca hermosa, a la que esperamos no le cueste encontrar su alma gemela humana.
Y por si fuéramos pocos, al día siguiente, nos dan aviso de otra perra que andaba vagando por un pueblo cercano. No sabíamos muy bien qué podíamos hacer por ella, porque la casa de acogida estaba ya saturada pero, afortunadamente, otra familia se ofreció a llevársela de forma temporal hasta que pudiéramos encontrarle un hogar. Pasó unos días estornudando mucho, por lo que, ante el riesgo de que tuviera una espiga en la nariz (muy frecuente en esta época), fue sedada en el veterinario, pero no se encontró ningún cuerpo extraño. Lady, como la hemos llamado, es muy gracioseta y alegre, algo miedosa y desconfiada al principio; aún le cuesta relacionarse con la gente desconocida y le ladra a otros perros, pero será cuestión de tiempo que se dé cuenta de que ya no tiene que temerle a nada, que ahora velamos por ella y nada malo va a pasarle. Como siempre, esperamos que tenga suerte, y que no se convierta en otra invisible y pueda encontrar una familia que la quiera como se merece.
Pero los rescates del mes de julio no se quedan aquí. A mediados de mes, la Guardia Civil avisaba a nuestra veterinaria de dos gatos lactantes que habían aparecido metidos en una bolsa de plástico en el interior de un contenedor de basura (otra vez…). Nos llamó de inmediato y fuimos a recogerlos. Son dos bebecitos que aún no habían abierto ni los ojos; con tan solo uno o dos días de vida algún desalmado los había arrojado a la basura como si sus vidas no valieran nada. Los hemos llamado Río y Cúa. Ahora se encuentran en casa de acogida y evolucionan favorablemente; ya están abriendo los ojitos y se zampan los bibes como dos tigres.
Ese mismo día, nos trajeron a Greta, una gata cuyo estado nos puso la piel de gallina. Al principio nos pareció un cachorrito joven, ya que era súper menudita (pesaba tan solo 1 kg), pero el desgaste de sus dientes y la acumulación de sarro en ellos, indicaban que era más mayor de lo que parecía debido a su pequeño tamaño. Estaba completamente desnutrida y deshidratada, con un ojo lleno de pus y una diarrea de escándalo. Se quedó hospitalizada en la clínica veterinaria, pero tras un par de días de lucha, su cuerpecito ya no podía aguantar más y tuvimos que ayudarla a irse sin dolor.
El último en llegar ha sido Lince, una preciosidad pelirroja de unos 3,5-4 meses, que fue encontrado por unas chicas, cojeando y bastante asustado. Tras una primera exploración, se temía que pudiera tener una pata rota, así que lo llevamos a hacer radiografías y, por fortuna, no había fractura, así que está con tratamiento y a la espera de su completa recuperación para poder encontrar un hogar en el que comenzar su nueva vida.
En cuanto al Proyecto CES, este mes hemos podido capturar a 10 gatos (5 hembras y 5 machos) que ya han sido castrados y devueltos a sus colonias; todos, menos uno, Micky, que fue recogido con una gran herida abierta en el cuello y se ha quedado hospitalizado unos días hasta que recupere un poco y después será devuelto a su colonia. Además, dos de las esterilizaciones (un macho y una hembra) han sido pagadas por sus cuidadores, a los que damos las gracias por la ayuda. Seguimos con las jaulas trampas a pleno rendimiento y esperamos poder capturar a más felinos ferales el mes que viene.
Por el momento, estas son las novedades que os podemos contar. Como siempre, os seguiremos manteniendo informados de todo lo acontecido y así podáis ser partícipes de nuestras actividades, con sus alegrías y sus penas.
Muchas gracias!!!