Una vez más, os escribimos para informaros de lo acontecido durante este mes de mayo.
Este mes hemos tenido que recoger una camada de cinco gatitos que apareció en mitad de la nada; los habían dejado allí solos, con una caja de cartón y una pequeña manta. De momento han sido desparasitados y hemos tenido que tratar a la mayoría de ellos por problemas gastrointestinales. Ya están mucho mejor, comen solitos y no paran de corretear por todas partes. Esperamos poder encontrarles adopción pronto y si no es así, pasarán a formar parte del Proyecto CES y serán esterilizados en cuanto tengan la edad suficiente para someterlos a la cirugía.
¿Os acordáis de Nube, la gatita sorda que recogimos a principios de abril? Pues actualmente se encuentra en pre-adopción en la casa que seguramente acabe siendo su hogar definitivo. La familia de nuestro Sami, otro de los gatos que tuvimos en adopción, se ha interesado en ella y lleva con ellos un par de semanas a modo de prueba; si todo va bien, y así parece que va a ser, se quedará allí con ellos! Pero las novedades sobre Nube no se quedan ahí… Llevábamos un tiempo notando algo raro en ella (aparte de su sordera); a veces parecía respirar con dificultad y jadeaba, cosa muy rara en los gatos, así que decidimos llevarla al veterinario, donde le hicieron radiografías y pudimos ver que presenta una antigua fractura de los senos paranasales. Obviamente, desconocemos qué pudo pasar, pero sospechamos que pudo ser atropellada o golpeada en la cara antes de que la recogiéramos. El caso es que esa lesión ya no tiene solución, pero la veterinaria que realizó el estudio radiográfico cree que no le dará problemas y tan solo habrá que vigilar posibles catarros o infecciones dentales y oculares que podrían complicarse fácilmente al tener los cornetes nasales destrozados. Ronca un poquito a veces y cuando hace esfuerzos físicos (le encanta correr y jugar con su nuevo compañero Samito) se sofoca un poco. De hecho, estos días ha empezado a estornudar un poco, así que nuestra veterinaria ya le ha pautado tratamiento para que no vaya a más. En cuanto esté recuperada, será vacunada y podremos entregarla en adopción definitiva con la familia que ya está locamente enamorada de ella. Con suerte, para el mes que viene os contaremos el final feliz de esta historia.
Siguiendo con las buenas noticias, Ulis, nuestro otro gatito especial, también puede que tenga suerte. Una familia ha realizado el cuestionario para su adopción y estamos a la espera de poder realizar la visita pre-adopción para asegurarnos de que estará en buenas manos antes de entregarlo definitivamente. Así que, crucemos los dedos, puede que Ulis finalmente no tenga que volver a vivir en la calle y por fin pueda disfrutar de una familia definitiva. Su posible familia de adopción no estará disponible para que podamos hacer la visita hasta junio, así que será el mes que viene cuando podamos confirmar que nuestra panterita ha encontrado su hogar!
Por su parte, Eros sigue siendo el invisible de la familia pegasera. El pobre tiene la cruz de perro potencialmente peligroso colgada del cuello y parece que nadie se decide a darle una oportunidad. Ya sabéis que nuestro empeño es incansable, así que no descansaremos hasta lograr encontrar a nuestro dios del amor el hogar que se merece.
Y ahora nos toca hablar de Jazz… Muchos ya os habréis enterado a través de nuestras redes sociales. Jazz nos ha dejado. Estamos completamente destrozados. Después de tantos meses de lucha con él, de ver cómo se convertía en un perro diez, nos sentimos desolados y frustrados. De un día para otro Jazz cambió drásticamente; Bea, la educadora canina que lleva trabajando con él todo este tiempo nos avisó de inmediato y decidimos comenzar a hacer las pruebas necesarias para saber qué le pasaba. Empezamos haciendo analíticas sanguíneas de todo tipo y ya estábamos programando el siguiente paso, que seguramente consistiría en viajar con él para hacerle un TAC, pero Jazz empeoró rápidamente y no nos dio tiempo a más. Por su propio bienestar tuvimos que tomar una de las decisiones más difíciles y dejarlo marchar para que no sufriera más. Las lágrimas ya se han secado, porque ya no nos quedan más para llorar, pero él siempre estará en nuestros corazones. Hemos recibido muchas muestras de apoyo y agradecimiento por cuidar de él hasta este último momento y estamos muy agradecidas a todas esas personas que han confiado en que desde el momento que llegó a nuestras manos lucharíamos por él. Ahora sólo nos queda seguir mirando hacia adelante, coger fuerzas para poder seguir peleando por cada uno de los animales que lleguen a nosotros sin perder la esperanza, aunque a veces las cosas no tengan el final que tanto esperamos.
El día 31, justamente antes de terminar el mes, hemos recibido aviso de un gato tirado en la calle y nos hemos ido a buscarlo. No sabemos qué le ha pasado; nos habían dicho que podría estar atropellado, pero una vez en la clínica veterinaria, no parece ser esa la causa de sus males. El pobre está en shock, inconsciente y su vida pende de un hilo. Se ha quedado hospitalizado, con fluidoterapia y tratamiento intravenoso; haremos lo posible para salvarlo, pero tendremos que esperar unos días para poder contaros algo más sobre este nuevo pegasito, al que hemos llamado Tropi.
Por último, para este mes que empieza tenemos pensado retomar el Proyecto CES, así que volvemos a la carga con las jaulas trampa. A estas alturas ya hay muchas gatas paridas; esperamos tener más suerte ahora con las capturas que hace un par de meses cuando estaban en pleno celo.
Por el momento, estas son todas las novedades que podemos contaros.
Os seguiremos contando el mes que viene!
